Día super casual en la playa con mi mejor amiga, habíamos preparado botanitas, libros y chisme para aprovechar el sol y agarrar un buen bronceado para el regreso a clases.
Pasaron las horas, comimos y ya no teníamos más qué hacer, la verdad ya estábamos un poco aburridas. De repente sonó nuestra canción fav del momento en una bocina suuuuuper cool (con lucecitas y sonido increíble).
Comenzamos tarareándola, pero no resistimos más y tuvimos que cantarla a todo pulmón, entonces se acercó un chico que estaba en esa bolita y nos sacó a bailar.
¡Naaaaambre!
Se armó la fiesta.
Al final, mi amiga y yo compartimos teléfonos con ellos y en la noche salimos a dar la vuelta por la 5ta Avenida.

PD: El alma de la fiesta fue la bocina así que ya pedí la mía ?
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